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abr 2015

Hicieron falta aparadoras y aparadores

16 de Abril de 2015. Pascual Pascual Pascual

Por Pascual Pascual, sindicalista de CCOO Vinalopó- Vega Baja.


Permítame Sra. Mercedes Alonso que discrepe de usted (y le diga que el Día de la Mujer Trabajadora son todos los días del año en casa y en la empresa y no solo el 8 de Marzo como conmemoración y recuerdo de un hecho histórico), y sobre todo de esa forma de homenaje que quiere rendir a las aparadoras, a esas mujeres trabajadoras. ¿Y a los trabajadores en el aparado? Que digo yo, que también los hay. Pero me extraña que usted no sepa y tenga tan poca sensibilidad y solidaridad con estas mujeres y hombres que trabajan en el aparado y en sus domicilios como si fueran clandestinas/os, que de hecho así están catalogados/as.

Vayamos rompiendo prototipos, pues cuando hablamos de aparado no estamos hablando de una mujer, ya que en otras partes de España hay aparadores y cortadoras.

Hicieron falta aparadoras, ¡y más que harán falta! Ya no es la madre quien enseña a la hija y la motiva para que siga trabajando como aparadora en casa, si no, que el taller y la empresa que le lleva los cortes para aparar en casa no les paga ni siquiera el salario mínimo interprofesional, es por ello que la hija busca trabajo en otros sectores, perdiendo el calzado una de las profesiones más valoradas, el aparado completo (el aparado completo es una de las profesiones más valorada dentro del calzado, equiparada al montado y centrado, dentro de la valoración de puestos de trabajo realizado por el empresa Andersen Consulting, en colaboración con los sindicatos y Fice, a nivel nacional) o se llevan, como el aparado de zapatillas deportivas a Andalucía, Marruecos o, a los talleres que ponen los asiáticos con asiáticas aquí, en Elche, que trabajan las 24 horas.

Hay que valorar a esa mujer que le lleva el repartidor/a la bolsa de faena, con el corte de tiras para unas sandalias de señora, un salón para un zapato fino de señora, o corte de caballero troceado en, taloneras, empeines, palas, puntas y adornos y los va uniendo para terminar un corte, preparado para la cadena de montado o los cortes en zig-zag para el vulcanizado, o inyectado de zapatillas, o deportivos ¡y este es el trabajo que no está pagado y menos a domicilio!.

Nos gustaría que la mayor autoridad de la ciudad saliera en favor de estas/os trabajadores/as, planeando y exigiendo que se les aplique la normativa vigente, convenio del calzado y el Estatatuto de los Trabajadores/as, fruto de la negociación colectiva que hemos llevado los sindicatos, en particular Comisiones Obreras, con la representación de los empresarios en el periodo democrático (y añado), desarrollando a mejor una ley y derecho que venía recogido en la legislación (reglamentación para las industrias de la piel de 1646 incluida en las ordenanzas laborales de 1969 y 1977 para la industria de la piel incluido, el curtido, marroquinería y el calzado) y después de ésta fecha, es cuando participamos los sindicatos para incluirla en el convenio del calzado, usted que es licenciada en derecho, igual lo puede saber. En donde no solo tienen que percibir un salario, si no, que también un porcentaje para gastos de luz y herramientas.

¿Dónde está el problema? Pues que nuestra autoridad reivindique (aparte de hacerle el homenaje) y exija con ellos, que se le aplique los derechos que todos y todas tenemos, para que dejen de ser esas compañeras/os anónimas/os, que están en sus casas trabajando más horas que tiene el reloj, sin estar dadas de alta en la Seguridad Social, (sin un salario regulado a la hora, más de 7 ?, más de 30 al día y más de 1000 al mes, dependiendo de las horas que se trabaje), sin vacaciones, sin derecho a las prestaciones sociales de sanidad, (que la tienen como cónyuge y por qué la sanidad es universal desde el primer gobierno democrático), desempleo, prestación de vejez,  que tendrían si estuvieran  dadas de alta en la seguridad social etc... etc... y que dejen de ser clandestinas/os, ponemos al hombre también porque hay aparadores, cortadores/as, cosedores/as de suelas blak, willi, los que tintan pieles y pisos, y fabrican unos pocos pares en un pequeño local para los almacenes.

Todo esto lo ligamos a la economía sumergida o clandestinaje   y a la competencia desleal que hacen unas empresas contra otras, que están al corriente de todos sus pagos con la hacienda pública y con los trabajadores/as, ¿ésto lo sabe usted Alcaldesa?. Pienso que no, porque nunca ha dicho nada en favor de estas trabajadoras/es para que tengan todos sus derechos, y las empresas o talleres  que tengan aparadoras  cumplan todas sus reglas de juego, y se lo decimos también a esas empresas que tienen un cierto prestigio, pero al subcontratar lo cargan todo sobre el costo de mano de obra y sobre todo al aparado, no se olvide que el motivo de la descentralización de la producción del modelo industrial del calzado para abaratar costos cargándoselo a la mano de obra, fue el cortado al trabajo autónomo, el aparado a casa y a talleres, la fabricación y facturación una empresa y la comercialización y logística otra empresa.

El mejor monumento y homenaje con la alcaldesa y las organizaciones de los trabajadores que le podríamos y podemos hacer, es gritar a los cuatro vientos que se haga justicia con el aparado y trabajo a domicilio y las condiciones de trabajo que tienen las que trabajan en casa, que tienen la máquina en la cocina donde está el puchero, y más que buena olor de comida, huele a cola, en la salita donde tienen la estufa en el invierno y con la cola, se puede pegar fuego a las cortinas, que pasar ha pasado. O el absentismo escolar, que darse, se da, ya que en temporada alta el niño o la niña no va al colegio y se queda en casa cortando hilitos, para tener terminada la partida para cuando venga el repartidor, este es el mejor homenaje que se puede y debe hacerse.

La justicia que se debe hacer, es que tengan todos sus derechos como cualquier trabajador/a, y los empresarios o empresas que lo practican no hagan la competencia desleal con el coste de la mano de obra a las otras empresas que cumplen con las reglas de juego, para que no tengamos que decir mañana , y ya se empieza a decir, hicieron y hacen falta aparadores y aparadoras, y no porque no sean profesionales, que lo son, sino porque no se les motiva a trabajar en este sector que tanta riqueza ha dado a este pueblo.

Sra. Alcaldesa le informamos que desde Comisiones Obreras, reivindicamos y exigimos que la igualdad sea un hecho y no una anécdota, para que esta igualdad no sea un hecho oficial en los papeles, sino un hecho real y con igualdad de oportunidades en los centros de trabajo, sea este, el que sea. 

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