9

jul 2018

Tiempo de ganar

9 de Julio de 2018. Manel Nieto

Frente a la propuesta inicial de la patronal de subir los salarios entre el 1-1,5%, y a 850 euros el salario mínimo, el IV AENC supone un punto de inflexión para la recuperación salarial y contribuirá a un reparto justo y equilibrado de la riqueza entre los trabajadores y trabajadoras.


Amigos y amigas lectoras de esta tribuna, a la hora de poner título al presente artículo, no sabía bien cómo centrar lo que les quiero venir a decir, pues a mí me ayuda a situarme en el desarrollo del texto el título, sobre lo que quiero escribir. Al final he decidido el título que ustedes pueden ver, «Tiempo de ganar».

Y es que después de un proceso largo de movilización, negociación y vista desde la coherencia que nos caracteriza a CCOO, nos encontramos en un contexto económico bien diferente al de hace escasamente tres años, y ahora es el momento y tiempo de ganar.

No en balde, saben al igual que yo, que muchos han sido los años y los recortes que se han venido aplicando sobre las capas populares de nuestra sociedad, en sus diferentes vertientes y crudeza, haciendo tremendamente difícil el día a día para una parte importante de nuestra sociedad, del empobrecimiento de la clase trabajadora, así como ensanchando los niveles de pobreza y vulnerabilidad. Se ha reducido en mucho el cuadro de cobertura social y empobrecido de manera generalizada a esa mayoría social.

Pero en el papel que como sindicato tenemos que jugar, como sindicato general y de clase, en CCOO nunca perdimos el norte de hacia a dónde debíamos fijar nuestro rumbo para la mejor defensa de los intereses de las trabajadoras y trabajadores. Por ello, nos fijamos en unidad de acción con la UGT el conseguir un acuerdo con la CEOE y CEPYME. Este acuerdo, el IV AENC (Acuerdo por el Empleo y la Negociación Colectiva) ha sido un acuerdo que fue ratificado por nuestro máximo órgano de representación y dirección entre congresos, el Consejo Confederal de CCOO.

Veníamos a ratificar y dar carta de naturaleza a un IV AENC con un marco temporal para el 2018-2020, firmado el pasado 5 de julio, necesario para las personas, de su dignidad y para el fortalecimiento de la economía de este país, pero también para andar en el buen sentido de reducir la brecha salarial de las personas más vulnerables y que en estos años de crisis, las políticas reaccionarias e insolidarias han ido arrinconando cada vez más, estos son los jóvenes y las mujeres.

Un Acuerdo que contempla, entre otros importantes aspectos, una subida salarial en torno al 2%, más un 1% variable dependiendo de la productividad y situación de cada empresa. Asimismo, recoge el compromiso de establecer en 1.000 euros (por 14 pagas) el salario mínimo de convenio, en línea con la subida acordada para el Salario Mínimo Interprofesional (SMI).

Un importante acuerdo que, como ha subrayado el secretario general de CCOO, Unai Sordo, «supone un punto de inflexión para recuperar salarios, derechos e igualdad, y afecta sobre todo a la gente que peor lo está pasando». Este acuerdo pone fin a más de un año de arduas negociaciones, que llevaron a los sindicatos a convocar un amplio y sostenido proceso de movilización.

Un acuerdo que incluye elementos importantes y a los que no podemos ni queremos renunciar como, mecanismos de revisión salarial, recuperar la ultraactividad de los convenios, modificar el artículo 42 del estatuto de los trabajadores, acuerdo en materia de Formación Profesional para el Empleo, favoreciendo alternativas al despido, facilitar el relevo generacional, reducir la economía sumergida, medidas integrales para garantizar la igualdad laboral y salarial entre hombres y mujeres.

Lo veníamos diciendo, hay crecimiento, pero no hay reparto de la riqueza. Pues bien, hemos logrado un preacuerdo que sirve como base para el reparto, para recuperar derechos. Y todo esto, es una buena noticia para la clase trabajadora. Pero no hay que dormirse en los laureles. Hay que trasladarlo a los convenios colectivos en los dos próximos años y medio. Y hay que abrir una negociación con el actual Gobierno que, en el actual contexto, debe reforzar el diálogo social.

 

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